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Steak tartare
por Loizaga | 8 junio 2007
Nuestro plato de hoy no deja indiferente a nadie, bien sea por el asombro de la gente que lo prueba por primera vez o bien por los que ya lo conocen y repiten la experiencia.
Yo personalmente no acabo de acostumbrarme demasiado a su sabor, pero he de reconocer que a nivel internacional hace las delicias de muchos gourmets.
El origen del Steak tartare es bastante lejano. Se remonta al siglo XIII y fueron los guerreros tártaros quienes lo pusieron en práctica al portar la carne, su principal ingrediente, todo el dÃa bajo la silla de montar. Con el terrible ajetreo las piezas de ganado se iban ablandando y al final del dÃa estaban tiernas y ligeramente templadas, listas para ser troceadas y consumidas directamente sin ningún otro preparativo más.
Afortunadamente hoy la cosa ha cambiado. La carne debe pasar rigurosos controles y con ello se evitan males mayores. De todos modos, y no deseo hacer saltar la alarma, pienso que hay que consumirlo en lugares de mucha confianza porque aunque estoy seguro de que la ternera empleada no ha pasado ni un minuto bajo la silla de ningún jinete, cabe la posibilidad de que no esté lo suficientemente fresca o que no sea de primerÃsima calidad, lo cual desvirtúa totalmente la receta y puede llegar a poner en peligro nuestra integridad.
Para hacer nuestro Steak tartare necesitamos una buena pieza de ternera, o mejor aún si es de buey. Lo más importante es que la calidad sea excelente y que esté tierna. El corte se puede hacer con máquina pero yo soy partidario de hacerlo a cuchillo porque con ello evitaremos que se nos haga una terrible pasta y no es nuestro objetivo.
Una vez cortada en pequeños trocitos agregamos el resto de ingredientes; el ajo, perejil, cebolla, aceite de oliva y si lo deseamos se pueden añadir pepinillos y un poco de salsa Perrins. Se debe mezclar bien todo hasta elaborar una masa dispuesta como ven en la imagen. Para rematarlo hacemos una hendidura sobre el pequeño montÃculo y cascamos una yema de huevo en crudo. De esta forma a la hora de comer la mezcla resultará algo más untuosa y agradable al paladar. Hay que consumirlo rápido y debe servirse frÃo.
Categorías: Curiosidades, Recetas | 3 Comentarios »
8 junio 2007 a las 12:15
mmmm
lo de los guerreros tártaros era más higiénico ya que la carne se veia “atacada” por el sudor de los caballos lo mismo que si la sumergieras en vinagre de modo que en cierta forma, la carne estaba cocinada… no como el Steak tartare actual que está totalmente crudo lo que supone un peligro a la hora de comerlo (y ello sin contar el huevo crudo que lo acompaña)…
Todo para ti majo…
8 junio 2007 a las 13:29
Indudablemente es un plato que entraña cierto peligro porque no hay ni cocción ni macerado alguno. No lo he comentado pero hay quienes le agregan un poco de limón, que en parte ayudarÃa a desinfectar. Hasta aquà estamos de acuerdo pero el limón no es infalible, como tampoco lo son el vinagre y mucho menos el sudor de caballos.
Con esto vengo a decir que no me parecen fiables al 100% ni el original tártaro ni el actual. Hay muchos factores y carencias que los hacen inseguros a los dos, especialmente al primero.
Esto me recuerda la polémica del anisakis.
Insisto que no quiero hacer saltar el pánico pero sigo pensando que este tipo de preparados hay que consumirlos rápidamente y siempre sabiendo dónde lo hacemos.
Un saludo Patricia !!!!
11 junio 2007 a las 11:41
Obviamente, pasarÃa de comer el original… DÃos que asco!!!